A nombre de otra u otras personas pedir al Dios celestial por Su intervención sobrenatural y benéfica en favor de éstas como práctica sana y pura que satisfaga los anhelos y ruegos por uno o varias necesidades.
Como acto de amor, compasión y misericordia para los demás, desinteresadamente asumir el reto y tomar el caso de otros u otros que acuden en auxilio, en súplica y clamor hacia el Todopoderoso Dios.
El texto sagrado recoge innúmeras oraciones intercesoras en favor de personas, familias, naciones. He aquí unas pocas: Génesis 24:12-14; 17:18; Daniel 9:3-5; Salmo 122:6; Isaías 62: 6-7; Job 42:8; Juan 17:1-7; Romanos 10:1; 2 Corintios 1:11; Filipenses 1:19; Efesios 6:18; 1 Timoteo 2:1.
Queremos formar un ejército intercesor al unísono de los anhelos santos del Señor y Dios.
¡Usted puede engrosarlo!

